Cultura libre, el movimiento que está revolucionando el sector cultural, disponible en Madrid
Medialab Prado es una forma diferente de disfrutar la cultura. Centro financiado por el Ayuntamiento de Madrid, como todos los centros culturales, pero parte con una diferencia esencial: la elaboración de proyectos. Cuenta con un funcionamiento sencillo, desde el propio lugar proponen un tema sobre el que trabajar. Con esas bases se elaboran grupos de trabajo que tienen como objetivo devolver algo a la sociedad. Es decir, generar algún bien o servicio que genere una utilidad para cualquier sector de población.
Este laboratorio, situado paralelo al Paseo del Prado, es de tal calado en el mundo cultural y científico, que es uno de los atractivos en la candidatura de esta calle de Madrid a la Unesco llamada “Paisaje de las artes y las ciencias”. Esto ha sido utilizado como arma por diferentes partidos, arquitectos y académicos debido a las polémicas surgidas por el traspase de este centro al Matadero, ubicado en la plaza de Legazpi. Lugar en el que se empezarán a desarrollar los proyectos a partir de junio y que podría perjudicar a esa candidatura.
Hasta el verano, los proyectos podrán seguir disfrutándose en el centro de Madrid. El último de estos es Juguetoría, una iniciativa que busca diseñar y prototipar juguetes de forma colaborativa. Mediante una serie de actividades que pasaron por la investigación, el diseño y la fabricación, crearon una colección de juguetes que los jueces más duros, los niños, estrenaron y utilizaron. Durante todo el proceso las actividades estuvieron abiertas a la participación ciudadana, sin importancia de la edad o el conocimiento previo sobre el tema.
Quizá uno de los proyectos más interesantes llevados a cabo gracias a Medialab Prado sea ESCOVID19DATA, dedicado a la visualización y recopilación de datos por provincia sobre el COVID-19. Un equipo de voluntarios organizados mediante un grupo de telegram generan informes para hacer la información más accesible.
Otra de las ideas más repetidas en los proyectos de este laboratorio ciudadano es la lucha contra el cambio climático. Algo que se puede ver en “Materiales sostenibles“. Un proyecto dirigido a la experimentación de nuevos usos, combinaciones o técnicas en el uso de materiales a través de la combinación de la tradición artesanal, la experimentación biológica y la fabricación digital. Basado en la reflexión sobre sostenibilidad y la historia de los materiales. Este ha desarrollado construcciones arquitectónicas, fabricación de textiles, materiales para dar soporte a infraestructuras electrónicas y digitales, etc. Para este proyecto, Medialab Prado colabora con el proyecto TBA21 (Thyssen-Bornemisza Art Contemporary) y forma parte de la exposición de la artista Claudia Comte en el Museo homónimo durante la temporada 2020-2021.
Medialab también cuenta con una iniciativa que busca fomentar el encuentro intergeneracional, Campamento 0-99, que celebrará este año su tercera edición. Como su propio nombre indica, es un campamento de verano urbano para todas las edades. Su propósito es propiciar el encuentro, el conocimiento mutuo y el intercambio de valores entre distintas generaciones. Tras el éxito de su primera edición, el pasado 2020 el campamento se adaptó a la situación con la pandemia combinando las actividades online y presenciales.
Estos proyectos y todos los demás llevados a cabo por Medialab Prado no se podrían llevar a cabo sin el Programa de mediación e investigación. El objetivo de este programa es acoger a los nuevos usuarios, facilitarlos el acceso a la información y ponerles en contacto con proyectos en marcha. Además, dan apoyo logístico a las actividades de los grupos de trabajo y a los eventos diarios que se llevan a cabo en el centro. El equipo de mediadores culturales, compuesto por personas de perfiles muy diversos, se selecciona mediante convocatoria pública.
Pero, ¿qué es cultura libre?
El movimiento por la cultura libre es una iniciativa social que impulsa la distribución libre del conocimiento o contenido abierto para ser reproducido sin recibir ningún tipo de compensación o consentimiento por parte de los creadores originales de determinados trabajos, con el uso Internet y otros medios. Se trata de una ética de libre intercambio de ideas en la que el objetivo es desarrollar potencial creativo en comunidad a través de la cultura compartida: dar y recibir para construir nuevos significados que van configurando la evolución de la cultura y perseguir, así, objetivos comunes que dan sentido a la comunidad.