Los estudiantes de todo el país están sufriendo las consecuencias generadas por la pandemia del Covid-19. La enseñanza tradicional ha tenido que sustituirse por modelos de docencia online y los alumnos de todos los niveles educativos desconocen cómo y cuándo finalizará su curso académico. Los casi 220.000 estudiantes de segundo de bachillerato que se presentan este año a la Evaluación de Bachillerato para Acceso a la Universidad (EBAU) están siendo los principales afectados: está en juego su acceso a los estudios universitarios y los plazos y formas para finalizar el temario son muy ajustados.
Mientras que países como Francia o Reino Unido han suspendido sus exámenes de acceso a la universidad, España sigue adelante. El Gobierno ha publicado en el BOE una nueva orden con las modificaciones que sufrirá la EBAU como consecuencia de la nueva situación. El texto actualiza la orden publicada el pasado 17 de febrero, en la que se determinaban las características, el diseño y el contenido de la prueba, así como las fechas de realización y resolución de los exámenes. Las principales novedades introducidas son las siguientes:
- Ya no habrá dos propuestas de examen, sino un único examen con varias preguntas. El alumno tendrá que responder, bajo su elección, a un número de preguntas que habrá sido determinado previamente por el órgano competente de cada comunidad autónoma. Todas las preguntas deberán ser susceptibles de ser elegidas.
- Se mantendrá la duración de 90 minutos, con un mínimo de 30 minutos de descanso entre cada examen.
- Se procurará que, en cada una de las pruebas, haya preguntas de temas tratados antes de la suspensión de las clases. Así, los alumnos podrán escoger esas preguntas y otras relacionadas con el contenido impartido de manera online.
En cuanto a las fechas, los exámenes deberán realizarse entre el 22 de junio y el 10 de julio de 2020, publicándose sus resultados provisionales antes del 17 de julio de 2020. Las pruebas de la convocatoria extraordinaria deberán realizarse, como máximo, hasta el 17 de septiembre inclusive, publicándose sus resultados provisionales antes del 23 de septiembre inclusive.
La EBAU por comunidades autónomas
Desde 1975, las pruebas de acceso a la universidad han sufrido numerosas modificaciones en su diseño, organización y contenido. Por lo general, los cambios se producen a nivel nacional, es decir, afectan a todas las comunidades autónomas, pero también existen ciertas modificaciones propias de alguna comunidad, como el nombre o el temario a evaluar.
El artículo 7 del Real Decreto 1892/2008 establece que la prueba se tiene que adecuar al currículo del bachillerato y que la garantía de dicha adecuación es competencia de las administraciones educativas y de las universidades públicas. Sin embargo, en España existen 17 exámenes de Selectividad, lo que abre la polémica sobre si la EBAU es más fácil en unas comunidades autónomas que en otras, puesto que cada una, dentro de unos márgenes muy tasado, decide el tipo de examen, según la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE).
En primer lugar, las fechas de los exámenes son muy dispares. Desde la primera EBAU que se realiza en Castilla-La Mancha hasta las últimas en Cataluña y Galicia, existe más de una semana de diferencia. Normalmente, se celebran durante las dos primeras semanas de junio en convocatoria ordinaria y las dos primeras de julio en convocatoria extraordinaria, excepto en Cataluña, Andalucía, Murcia y Aragón, donde la convocatoria extraordinaria se realiza en la primera semana de septiembre.
Por otro lado, las tasas también son distintas, algunas difieren hasta 60 euros. Los precios más elevados se encuentran en Aragón con 171,91 euros y La Rioja, con 131,68 euros. Mientras que en Castilla-La Mancha y Andalucía, se encuentran las más económicas con 108,96 y 112,75 euros, respectivamente.
Por último, el nivel en función del territorio, tanto por el contenido como por la corrección, es una de las diferencias más criticadas por estudiantes y expertos. Aun así, de momento la mayoría de comunidades autónomas no han decidido aún cómo será la estructura final de sus exámenes para la convocatoria de 2020, solo han fijado un objetivo: celebrar la Selectividad con la mayor normalidad y seguridad, sin comprometer en ningún caso la salud ni de los alumnos ni de los profesores. Por ejemplo, en el caso de Cataluña, la adaptación y flexibilización son las características clave de sus exámenes donde el alumnado podrá elegir entre 21 materias de examen distribuidas en cuatro bloques.
Ejemplo de exámenes de EBAU de distintas CC. AA. Fuente: universidades de cada C. A.
Una prueba imprescindible
A pesar de la excepcionalidad de la situación, en ningún momento se ha planteado la cancelación de la EBAU en España. De hecho, el 17 de marzo, tan solo tres días después de la declaración del estado de alarma, el Ministerio de Educación ya negaba esa posibilidad y trabajaba, junto a los rectores y responsables autonómicos, en el aplazamiento de la prueba.
El Gobierno justifica la persistencia de la EBAU por su finalidad. La capacidad del sistema universitario para acoger alumnos es limitada, puesto que depende de los recursos económicos, materiales y humanos con los que cuentan las universidades. Por ello, la Selectividad se utiliza como filtro para la asignación de plazas.
Explicación sobre qué es la nota de corte de un grado. Elaboración propia.
Sin embargo, pese a la concurrencia en carreras como Medicina, según datos del Ministerio de Educación, solo el 38% de los 2.351 grados ofertados por las universidades públicas españolas para el curso 2018-19 obtuvieron una nota de corte superior a siete (sobre 14). Esta cifra se eleva en el caso de los dobles grados, donde la nota de corte superó el siete en el 67% de los 418 dobles grados ofertados. Además, el 32% de los grados y el 21% de los dobles grados no recibieron solicitudes suficientes para cubrir todas las plazas, por lo que su nota de corte fue de cinco, el mínimo exigido por ley.
Por tanto, más allá de las limitaciones estructurales, el objetivo principal de la EBAU no es restringir el acceso a la universidad a los mejores expedientes, sino confirmar que en bachillerato, independientemente de la comunidad autónoma de procedencia, se hayan adquirido las aptitudes y conocimientos necesarios para afrontar unos estudios universitarios, lo cual redunda en beneficio de la calidad de la educación superior. Es decir, estas pruebas velan por un nivel mínimo de conocimientos, de ahí su importancia y su persistencia incluso en una situación tan excepcional como la actual.
La Selectividad en Europa
La crisis sanitaria por el coronavirus no ha afectado solo a las pruebas de Selectividad españolas, sino que también se han visto afectadas las del resto de países vecinos. Según el informe Education at a glance 2019 de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), en 20 de los 27 países europeos pertenecientes a la OCDE se realizan pruebas obligatorias para el acceso a las universidades públicas. Estas son algunas de las alternativas que se proponen en los países vecinos.
Bandera de Italia. Fuente: Freepik.
Italia
Si el 18 de mayo la actividad docente no vuelve a las aulas, los alumnos que tienen que hacer la prueba de acceso a la universidad, conocida en Italia como Maturitá, harán una prueba oral en alguna plataforma digital. Si la vuelta a las aulas finalmente se produce, estos harán de forma presencial un examen escrito.
La ministra de Educación ha afirmado recientemente en declaraciones a los medios que el Gobierno no tiene la certeza de que los estudiantes hayan podido acceder en las mismas condiciones a la educación a distancia ofrecida por los colegios durante estos meses.
Francia
El Gobierno anunció el pasado viernes 17 de abril la cancelación definitiva de las pruebas de Selectividad, conocidas como Baccalauréat, que estaban previstas para mediados de junio. Ahora, estas serán sustituidas por las notas derivadas de la evaluación continua de los alumnos. La nota final corresponderá a la media de los resultados obtenidos durante el curso, con “evaluación continua”, pero no se tendrá en cuenta el período de confinamiento.
Bandera de Francia. Fuente: Freepik.
Bandera de Reino Unido. Fuente: Freepik.
Reino Unido
Los británicos han tomado la misma decisión que Francia. El Gobierno de Boris Johnson está diseñando un nuevo sistema de evaluación para que los alumnos que quieran matricularse en la universidad presenten una nota basada en su progreso académico a lo largo de los últimos cursos, la valoración de los docentes y la participación en la clase.
Alemania
Alemania ya está en pleno proceso de pruebas de Selectividad. El Abitur, término con el que se conoce la prueba en el país, es un examen conocido fundamentalmente por su dureza. El Gobierno alemán lo está realizando bajo estrictas normas de higiene y manteniendo la distancia entre los alumnos. Tan solo se permite la presencia de cuatro alumnos por aula y, desde el Gobierno, se avisa en un comunicado de que los alumnos deben acudir abrigados (con bufanda, pañuelo…) porque las ventanas y la puerta se mantienen abiertas para garantizar las medidas de higiene.
Bandera de Alemania. Fuente: Freepik.
En definitiva, España, al igual que el resto de países, se está adaptando a las nuevas circunstancias provocadas por el Covid-19. Sin embargo, todavía quedan algunas incógnitas por aclarar en el devenir de los próximos meses, lo que hace que millones de estudiantes en todo el mundo miren con incertidumbre su futuro académico.
