El PSE es la llave al nuevo gobierno con PNV
El pasado 21 de abril, las elecciones vascas mostraron un fragmentado panorama político suscitando así un amplio abanico de opiniones.
El Partido Nacional Vasco (PNV) triunfó nuevamente … Pero no fue el único: paridad con EH Bildu.
Este empate no es de extrañar, pues estaba pronosticado por encuestas previas (Sigma Dos o EGB). Sin embargo, EH Bildu toma la delantera en cuanto a provincias se refiere, ¿en negociaciones futuras se hará notable este desbarajuste? Seguramente sí.
Aunque estos resultados eran “esperados”, no debemos caer en el adormecimiento de nuestra conciencia y nuestra moral. No son normales estos resultados, no debíamos esperar esto.
Es sorprendente la claridad con la que las urnas reflejan un contraste entre las posturas. Unas posturas, que además muestran un estrecho margen de diferencia. Ha sido así, el PSE la alianza necesaria para que PNV pueda gobernar.
Tras la publicación de los resultados, los líderes políticos ya han dado sus discursos entusiastas, como el Presidente de PNV, Andoni Ortúzar celebrando la victoria, o el candidato a lehendakari, Pello Otxandiano, acompañado de Arnaldo Otegi, pidiendo que “Implementar políticas públicas más igualitaristas y más progresistas. Hay que poner este país en marcha”, afirmando que su partido es “la primera fuerza política de Euskal Herria con más distancia que ayer”, palabras que produjeron un gran revuelo entre los simpatizantes, quienes comenzaron a gritar en euskera “¡Independencia!”
Destacable el discurso de la portavoz del Partido Popular, Cuca Gamarra, quien felicitó al Partido Nacional Vasco pero que quiso reseñar el resultado de Bildu, “no es una buena noticia para la sociedad española”. El líder de Vox, Santiago Abascal, por su parte, sentencia con un “ETA y el partido separatista vasco han ganado las elecciones y que los españoles las vamos perdiendo”.
No es nueva la polarización política española. Siempre ha sido así. Sin embargo, debemos analizar la situación que no muestra las urnas, y reflexionar acerca del motivo de esa polarización tan notable.
Además, el revelador aumento de EH Bildu, que escala, pero no lo suficiente, hace que tengamos que observar con mayor detenimiento este acontecimiento cuanto menos superfluo y las consecuencias que deparan en el porvenir.
📆El pasado 21 de abril, las elecciones vascas mostraron un fragmentado panorama político suscitando así un amplio abanico de opiniones.
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