La educación como base de una sociedad más equitativa
Los cambios sociales y educativos a favor de la igualdad no han sido suficientes para eliminar muchísimos de los prejuicios presentes en la educación, explica Ana Herrero. Los datos dan la razón a la orientadora en Brains International School, ya que se puede ver cómo la participación femenina se ha reducido a menos de la mitad en carreras como Informática.
El rol de ellas parece que sigue ligado a los cuidados: más de un 70% se decanta por educación, salud y servicios sociales. Para Herrero, “la clave fundamental para limitar la brecha de género es educar en igualdad y eliminar los condicionamientos que nos limitan en los espacios educativos”.
Esto se lo han propuesto en el CEIP San Juan Bautista de Madrid. Este colegio de Ciudad Lineal ha empezado a distribuir sus espacios de una forma distinta a la que estamos acostumbrados. Noelia Barril, su directora, comenta que “antes todo el patio era un campo de fútbol, y los niños y niñas que no estaban interesados acababan relegados a los lados”.
No es un detalle cualquiera, ya que esta división que lleva implantada décadas tenía consecuencias en las relaciones sociales de niños y niñas. En este sentido, la directora del Instituto de Filosofía del CSIC, Concha Roldán, recuerda que “los niños son más dados a los juegos de pelota, y también en el juego se desarrollan posiciones de poder“.
Las expertas señalan que a los seis años los niños ya pueden haber interiorizado estereotipos de género, como que las niñas se crean menos inteligentes por la escasez de referentes femeninos que hay en sus libros de texto. En esta dirección apuntaba también Herrero, que tiene claro que “el trabajo empieza en la Educación Primaria, donde ya aparecen en las niñas sentimientos de inseguridad”.